La ptosis adquirida o ptosis del adulto significa que un párpado cae progresivamente, la mayor parte de las veces, está originada en la desinserción o desprendimiento del tendón que transmite la fuerza del músculo al párpado.
Este tendón a diferencia de los tendones de las manos o los brazos, es un tendón extremadamente delicado, que por razones quirúrgicas, por el paso del tiempo, por golpes, por utilización prolongada de lentes de contacto, puede soltarse de su inserción en el párpado, y de esa manera el párpado desciende.
La cirugía está destinada a unir nuevamente ese tendón, se realiza con anestesia local de tal manera de poder ajustar durante la operación, inclusive con el paciente sentado, la altura exacta de los párpados para que queden idénticos entre sí en la operación.
La cirugía no termina hasta que ambos párpados no están exactamente iguales, pero durante el proceso de cicatrización puede subir o bajar más de lo deseable uno de los párpados y puede ser necesaria una corrección ulterior.
Esta corrección se realiza en 1 de cada 20, por lo cual la cirugía tiene 95% de éxito en lograr simetría y contornos entre ambos párpados en el primer procedimiento.